4.10.06

la máquina

se contiene hasta que estalla de sensibilidad desbordante absoluta y delirante.
por qué grita? que espera ahi sentada con los mecanismos ezquizofrénicos barajando espasmos y enfermedades venéreas?
se contagia a cada momento del frío y los temblores excéntricos que retumban incansablemente entre las paredes y huecos del cubículo donde convive con otros.
algunos son pulpos con ventosas vizcosas hechas de puré.
no hay purificadores de aire, ni elementos desintoxicantes.
los perros se murieron hace años pero quedaron los cadáveres agusanados.
resuenan ecos y ladridos lamentables.
la máquina exige a todos desde su escitorio lleno de pelusas y alambres enroscados, con los brazos de sinfines de acero. sigue gritando. somete, no supera los traumas, exhala humo, se apolilla, vibra y retumba.
no se desploma, agunta hasta que aparece el sudor, la transpiración más celular y ruidosa del tiempo aqui presente, de lo que es en el aire.
todos giran y se deprimen, pero no pueden demostrarlo, porque la máquina es el horror, y temen...
le temen.